Wednesday, February 14, 2007

Catorce de Febrero

Todos soñamos con Shampoo, pero acabamos casándonos con Akane.

Wednesday, February 07, 2007

Un baúl para que un cínico naufrague

Imagínate una mirada tan densa que ni una pedrada la corta, una piedra tan débil que ni a una mirada resiste, un corazón hecho jirones por la voz de una mujer, un saco de arena cayendo lentamente y dando vueltas por unas escaleras, un beso pequeño que se queda flotando, una daga romana clavada en el costado, una S gigante pintada con tiza, que tú seas la sombra que proyecta la pared y no al revés, una ocasión única repetida hasta el infinito, y una sóla manera de entender las sencillas reglas del mundo.
Pido la paz, la palabra se la merecen otros más que yo. Pido silencio para mis torpes ensayos. Pido contradicción para los sabios, contrariedad para los resabiados, contribución para los infelices.
Pido tu amor, y con este mundo me conformo.
Deseo que seas real la próxima vez que me apetezca escribirte.
O que yo no pueda escapar de mi imaginación.
Dame tu oportunidad, libre pensadora, regálame tus curvas modernistas, hazme soluble en las verdades definitivas que adornan la mentira de lo percibido. Ilumíname, conocimiento. Ciégame, saber, si es preciso, pues de nada me servirán los ojos si conozco el camino por la memoria de quienes me superan.
Hasta nunca, viejo imaginario de metáforas fotocopiadas.
Adiós.
Adiós.

Palabras

Alimentábamos a las persianas con nuestros cuellos blancos, las hojas quedaban barridas por el viento. Era marzo en la escuela, y fuera un Noviembre caluroso, salvo en las estaciones de trenes, donde el tiempo viene dado por la longitud de las despedidas.
Fue entonces la huelga de palabras. Desde las alcantarillas, contemplando. "Pueyo" y "resplandor" desaparecieron del Diccionario, junto con "juventud" y "torrija" y otras miles más que muchos ni conocíamos.
Una sequía inesperada nos dejó, tan sólo, con los aburridos significados de las cosas.
Ríos de metafísicos inesperados, abogados de la razón, de la sinrazón, y de lo que queda en medio de ambas nos vinieron molestando con protestas mudas.
Hasta que ellos también dejaron de llamarse de ningún modo.
Y nosotros seguíamos dejando caer las persianas como guillotinas, sobre nuestras gargantas moradas. Era la mejor manera de pasar un día sin nada que echarse a la voz.

Bienvenida

No caí en que tenía este título pendiente, y ya ha pasado más de una semana desde que mi amiga/enemiga Elvira volvió de dónde cojones estuviera. Me alegro de no tener que rellenar el post con ñoñerías del estilo "Por fin estás de vuelta" "Gracias por volver para alegrarme la vida" "Mi existencia era una noche obscura del alma hasta que viniste tú a iluminarla con tu sonrisa de lamparilla de los veinte duros" Y todas esas cosas que se suelen decir cuando eres un asocial que, por no estar acostumbrado al trato con la gente, no sabe expresarse moderadamente.
Lo dejo, entonces, en que me quedan unas cuantas borracheras pendientes con esta mujer y que le deseo que tenga toda la suerte que yo he tenido al darme cuénta de dónde debía parar de correr y empezar a fumar y a leer cosas raras en los parques, para que todo el mundo vea lo interesante que puedo llegar a ser.
A ella le dedico la siguiente abstracción:

CIUDADANO PI: El ente de hierro hizo mi alma dura. Lágrimas caían hondas, expandiendo mi rádar. Viene noche, latín quiebra, caídas de ciego, gritos precoces del panal de caídos. Tú, siempre brazos, siembra-rezos.
FIN