Sunday, February 02, 2014

El que siempre camina un paso por delante

La descabellada broma
que hace chocar al olvido su puño
contra las puertas,
mudez, saldos negativos, sueños
amarillos como papeles que han vivido
cerca de la luz
se disipan.

Como una primitiva estirpe hueca
de manos sin hueso retorciéndose
(gusanos de lo pasivo)
editando conciencias, atando muertos como fardos
tiñiéndolos de espacio
dejándolos yacer en la cuna de una lágrima indecisa.

Eres la que gira las manecillas,
y el que traga el tuétano de las palabras.
Tienes la sonrisa equivocada de quien no trae nada consigo,
y pensarte es darse al sufrimiento.

A veces, cuando los ojos comienzan
a volverse hacia lo que no existe,
se puede atisbar el rastro de sangre que deja tu capa,
el camino quebrado a tu paso,
la música acallada del tiempo.