Sunday, December 19, 2010

Luna de noche, oscuridad infinita y un buen montón de tristeza aliñando la ensalada de mi desesperación

Me siento como un pescado
frito y salado.
¿Por qué estoy sólo? ¿Es que ya no molo?
La luna me acompaña, con sus frías lágrimas blancas que son como...
una cosa muy triste, muy desesperante, como un ingenio romo.
Así que me ahogo en el agua de las lágrimas de todos los tristes,
tristes,
tristísimos días de penuria triste.
Aunque como tres veces al día
al filete no le encuentro ningún sabor, ya esté salpicado de ambrosía.
Negra rosa, agria mariposa
va mi dolor por delante
Y no logro arrancar de mi pecho soldado al peso de mi propia mortalidad distante.
Estoy triste de cojones ¿No se nota?
Esperanza rota.
Como mi router.
Ana María Matúter.

Fin.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home