Sunday, September 11, 2005

Soy una breva, soy una breva

"De momento, y antes de que les parezca otra cosa, les aclararé que soy una persona totalmente normal. Tengo mis problemas, mis neurosis, sangro si me pinchan, sufro, me enfado, no creo en los políticos ni en la bondad de las mujeres que me ofrecen a sus hijas a cambio de un poco de dinero. Trabajo, estudié en su momento. Y dentro de unos años tendré que pensar en jubilarme. No he tenido hijos, pero sí una mujer que me lleva apoyando desde hace casi treinta años.
Por lo demás y para contarlo todo, les confieso que hay una particularidad que me distingue: Yo soy simétrico. Absolutamente simétrico. Respecto a los tres ejes. Resultado de lo cual tengo cuatro bocas, ocho ojos, no tengo piernas y floto en el aire a un palmo del suelo. Con mis ocho brazos, repartidos en tandas de a dos a derecha e izquierda, arriba y abajo, me ayudo para realizar las mismas tareas que cualquier otro, con mayor rapidez si se trata de algo manual. Aunque las carreras nunca se me han dado bien.
Tengo un amigo, un pobre hombre, que ahora lo está pasando mal porque se ha quedado viudo. Ahora vive sólo en el piso que está al lado del mío y yo, siempre que mi trabajo de contable me lo permite, lo visito y lo animo para que salga y no se enclaustre. Infructuosamente, me temo.
En una de nuestras últimas reuniones, en que yo intentaba convencerle para que abandonase aquella reclusión que tanto mal le hacía, me alarmó terriblemente oírle decir que ya no quería seguir viviendo. Que no tenía sentido continuar. Acabé por enfadarme con él, y lo acusé de cobarde. Él levantó sus ojos llorosos hacia un par de los míos. Y luego volvió a bajar la cabeza. Abandoné su casa carcomido por la culpa.
Cuando volví a mi piso, me dirigí directamente a la cocina. Me sentía realmente mal. Abrí la nevera donde estaban los restos, debidamente sazonados, de la esposa de mi amigo. Y encendí el gas para poner el aceite a hervir. Me prometí, mientras lo hacía y por penúltima vez, no hacer caso a mis instintos. Y todo desde aquella noche de Walpurgis"

0 Comments:

Post a Comment

<< Home